VACIO

 

No sé porque en este silencio que envuelve mi cordura, ya no sé

si estoy despierta o dormida.

Tan solo sé que solo cuando me hago conciencia, del momento, es casi media noche.

Hora de brujas…compañera en mis delirios.

Ellas saben de mis a tribulaciones, y pesadumbres, secretos, locuras,

todo un espejismo, de realidad o delirios-

Y me pierdo tantas- veces-en esas noches oscuras, en esas horas compañeras de mí de mis angustias.

Unas veces sueño despierta, otras las más dolientes, sueño dormida.

He pasado media vida, recordando mis 15 años.

Y otra viviendo una vida que no era la mía.

No me quejo, quien pudiera pasar por lo mismo.

Tener los niños dormido darle  vuelta y velar sus sueños. Perderme en sus sonrisas.

Hoy la casa se ha hecho grande, vacía-

A veces quisiera tener don palabras, y poder despojarme de todos estos sentimientos que me envuelven, sin dejar que entre el sol por mi ventana.

Pero solo soy una aprendiz de junta letras, que algunas veces acierto a dejar ver algo de lo que realmente siento.

Hoy es un día de esos donde me asomo a mi jardín y me siento igual de triste que él.

 “Con las hojas marchitas”

Carmen Sánchez