A NOCHE ABRI LA VENTANA.

 

Anoche abrí mi ventana.

Corría una brisa, que me recordó la brisa del mar.
Todo lo que más tarde sucedió, ni yo misma, lo sé.

 La imaginación puede jugarnos malas pasadas.

Estas, no fueron el caso.

Tan solo con los ojos de la mente.

Anoche sentí la brisa en mi rostro.

Incluso percibir el olor de mi; mar- 

Creí sentir la arena mojada en mis pies descalzos
y corrí detrás de las olas y me embriague de él.

 Sólo fueron unos instantes.

Pero  en esos instantes mientras duró.
Me sentí tan libre.

Que tuve alas y eché a volar-

Carmen Sánchez.